A los creadores de los anuncios
como el de Estrella Damm:
Gracias.
Por hacernos soñar con un verano maravilloso,
de playas dignas de paraíso,
de mañanas de resaca
tras largas noches de fiesta.
Un verano lleno de viejas amistades,
que se ven reforzadas con cada brindis que hacemos
cerveza en mano.
Porque brindamos por lo bueno que nos ha dado la vida y
por las amistades que están por venir
en esos meses de calor, arena y amor.
Porque qué es del verano
sin ese amor fugaz y apasionado.
Ese amor de dos meses que no se olvida,
juego de miradas, dedos que se entrelazan y
que juegan en el pelo lleno de salitre.
Gracias por hacernos desconectar un momento de la rutina,
planear escapadas, soñar con dormir en la playa
y por hacernos pensar
"Yo también quiero un verano como el de Estrella Damm"